La vida pasa más rápido porque estamos expuestos a tantos estímulos y obligaciones que los días se van volando , no tenemos una vida pausada y renegamos por ello pero en realidad hacemos muy poco por contrarrestar esta situación .
Vivimos para reacciónar a todo lo externo , el mundo moderno nos tiene atiborrados de entretenimiento y exigencias laborales , somos seres hacia afuera y en ningún momento del día damos una mirada a lo interno.
En medio de tanta velocidad de vida es bueno tener unos minutos , preferiblemente al acostarnos para escuchar nuestro interior , meditar y analizar quienes somos y que hemos hecho durante ese día , debemos apagar todo, hasta la luz ,quedarnos a oscuras y en este proceso autoreforzarnos de manera positiva , reafirmarnos que somos personas valiosas y que podemos mejorar día a día haciendo el bien en lugar de ser dañinos , en estos momentos de reflexión debemos agradecer a Dios Todopoderoso por lo que tenemos y sentirnos contentos al final de la meditación , si lo hacemos diario sería fabuloso pero si no se puede por lo menos día de por medio , creo que es una alternativa de respirar sin estrés ni preocupaciones y escucharnos detenidamente para nuestro beneficio permanente.