lunes, 30 de noviembre de 2009

Mente Egoica


En el artículo anterior mencioné que peor que la crisis económica , es la interpersonal y de hecho esta situación da origen a las guerras , ambiciones de poder , la falta de consenso para aliviar el daño ecológico mundial ,la ausencia de solidaridad y voluntad política para solventar el problema de la pobreza y tantos eventos más. Parte de este problema de crisis interpersonal se debe a la mente egoica , esa forma de pensar donde sólo prevalece el uno mismo. En las continuas interacciones con otras personas ponemos a prueba que tanta intensidad mostramos de nuestra mente egoica , este tipo de mente que mira hacia adentro .
Carlos Azagra define al ego de esta manera:"El ego es un elemento hábil, sagaz, rebuscado, muy inteligente, experto en el arte de las representaciones, en el teatro de la convivencia humana. Es el mejor "actor" creado por la evolución. Posee una imaginación frondosa y puede interpretar el rol del ser más desdichado de la Tierra con la misma firmeza y convicción con que minutos más tarde representará al más feliz “El protagonismo es la cara externa del ego, que busca subsistir a toda costa, creando mecanismos de defensa: 1) Se apega a los roles, pero no a las ideas. De esa manera, no se aferra a los afectos. Pero, por otro lado, hace que la persona sufra de trastornos obsesivos. 2) Los conflictos producidos por los engramas, como la ansiedad, los condicionamientos, la baja estima y los impulsos que son reprimidos, el ego los transforma en síntomas somáticos que afectan el sistema nervioso. Esta es otra de las facetas del rol de víctima. 3) Desplaza las emociones originales para no debilitarse y las transfiere de la persona original a otro sustituto más aceptable.
.Salinas Goytía dice que en lo más profundo de nuestras existencias individuales y colectivas, "los males," "los problemas," "lo indeseable," "las crisis"; en fin, todo lo que conspira contra nuestro propio bienestar y crecimiento, como lo que por añadidura conspira contra el bienestar y crecimiento del prójimo, de los demás, es "efecto de nuestras inconsciencias." Si, como individuos y como colectivos de individuos, ganamos en "conciencia," "cordura," y de "racionalidad en el ámbito del ser, individual y colectivo, y no de la mente egoica solamente," seguramente aprenderemos mejor; tendremos mayor éxito; el éxito será más compartido; y, para todos, ese éxito será más sostenible, creciente y duradero.
Para esto, en el ámbito de nosotros como individuos y en el ámbito de nuestras organizaciones y países, tenemos que "mirar hacia adentro," y no exclusivamente "hacia afuera." En efecto, es difícil que, como individuos, demos a los demás lo que no tenemos.
Damos lo que somos, tanto como que somos lo que damos. Es igual con nuestras, empresas, organizaciones y países. Por esto, antes que nada, tenemos que cultivarnos y crecer como personas; luego y al mismo tiempo, podemos crecer como organizaciones, como empresas y como países.
La mente reactiva egoica , es la que actúa a raíz del ego, por ejemplo cuando tratamos de hacernos la víctima o tenemos un comportamiento retorcido para lograr nuestro propósito, estamos siendo egocéntricos*, por lo tanto nos estamos dejando llevar por la mente reactiva egoica. Aparte también podríamos hacer otra diferenciación dentro de la mente reactiva egoica: comportamiento egoico impulsivo y comportamiento egoico "retorcido" en el primero es cuando actuamos egoicamente sin pensar "Eres un mal nacido..., perdona no quería decir eso" por ejemplo y, en el segundo, es cuando el comportamiento no ha sido impulsivo sino que más bien ha sido como "pensado retorcidamente" como que le hemos dado vueltas al asunto antes de actuar. Rodriguez T. es de la opinión que en términos generales, todos sabemos que las etapas y niveles “inferiores” del psiquismo son predominantemente instintivos e impulsivos. También sabemos que algunos de sus estadios intermedios son adaptados a la sociedad, mentalmente ajustados, egoicamente integrados, sintácticamente organizados y conceptualmente avanzados. Pero ¿cómo son las etapas superiores? ¿Acaso constituye el “ego integrado”, o el “individuó autónomo” la meta superior de la conciencia de los seres humanos?
El ego individual es una unidad maravillosa de orden superior pero, comparada con la unidad del universo en su conjunto, no es más que un insignificante fragmento de la realidad total. Posiblemente, como afirma el estudio de Maslow, dispongamos ya de ejemplos claros de personas sumamente desarrolladas y evolucionadas, los grandes sabios y místicos del planeta.
Supongamos, que esos hombres representan la etapa superior del desarrollo de la humanidad, un estado tan alejado de la humanidad promedio como estado de los simios. Si esto fuera así, tendríamos una muestra aproximada del “estado supremo de la conciencia”, una especie de “estado superconsciente”. La pregunta es:¿Cómo avanzar hacia esos niveles superiores del desarrollo de la conciencia? Gran parte de los místicos-sabios que existieron a lo largo de los tiempos, nos han dejado un registro detallado de las distintas etapas por las que fueron atravesando en sus propias transformaciones, hacia las regiones superiores de la conciencia, permitiéndonos de ese modo, hablar no sólo del nivel de conciencia superior, sino también de todos los niveles intermedios que nos conducen a él. Si unimos a este conocimiento el minucioso estudio que realiza la psicología occidental sobre las etapas inferiores e intermedias, dispondremos de un modelo global y equilibrado del espectro de la conciencia humana.
Pensar un poco en los demás, desarticula poco a poco la mente egoica ,si nos convenciéramos que al ayudar a los demás nos ayudamos a nosotros mismos y al planeta entonces empezaríamos a corregir los múltiples errores debido a nuestro comportamiento impulsivo egoico.

sábado, 14 de noviembre de 2009

valores personales

En un mundo que nos presiona para catalogar el éxito en función a la acumulación de bienes materiales y apariencia física, la jerarquía casi no deja lugar a lo que realmente tiene importancia como los valores humanos ,morales y los personales. La presión se manifiesta cuando la sociedad separa las personas según los requisitos materiales ,físicos o intelectuales , los que van a la cabeza obviamente son los que tienen los tres , o más de uno ;considerar retomar los valores parece utópico sin embargo todo esfuerzo por revertir esta patrón social empieza por uno mismo.
Los valores personales son aquellos que cada persona considera imprescindibles y sobre los cuales construye su vida y sus relaciones con los demás. Normalmente suelen ser una combinación de valores familiares y socio-culturales, además de los que cada uno va aportándose a sí mismo según sus vivencias personales, su encuentro con otras personas, culturas...
En la pagina “ Quito “ en el tema código de ética aparece un interesante esfuerzo de mencionar factores puntuales de tres valores personales , donde cada uno de nosotros puede verificar su cumplimiento , a continuación el esquema:
1)Honestidad: Digo la verdad. No me aprovecho de los demás, ni de los bienes ni recursos ajenos.
Trato a todos con justicia, equidad y con apego a la ley. Soy auténtico, me presento como soy, sin atentar contra los derechos de los demás. Soy coherente entre lo que digo y lo que hago.
2)Bondad: Establezco y mantengo relaciones armónicas con los demás. Soy conciliador y mediador en situaciones difíciles o conflictivas. Sirvo y colaboro con todos en cualquier momento y lugar.
No soy rencoroso: sé perdonar los agravios u ofensas y evito causarlos. Soy solidario y reafirmo permanentemente mi compromiso y responsabilidad social.
3)Perseverancia: Busco sistemáticamente el logro de mis metas y objetivos. Cumplo con mis compromisos y responsabilidades, a pesar de las dificultades. No me desmotivo ante las dificultades. Busco alternativas de solución ante los problemas y circunstancias difíciles. Me esfuerzo por no dejar trabajos pendientes.
4)Si agregamos la humildad consideraría como factores puntuales los siguientes: No hago alarde de lo que tengo o lo que sé. Prefiero que otros estimen mis contribuciones .Si alguien dice ser mejor que yo lo acepto no trato de enfurecerme. No aparento ser humilde .
5)Tolerancia : Ante las dificultades o limitaciones de los demás trato de ser comprensivo. Tengo paciencia y no me enojo si las cosas no salen como lo he planeado.
Argandoña Antonio establece que los valores se predican de las personas y de las colectividades, pero de diferente manera.

Ahora bien, si una persona es tolerante, y otra también lo es, y una tercera, y otra, ¿podemos concluir que la sociedad formada por todas ellas será tolerante? Sí, pero sólo como condición de posibilidad. Para hablar de un valor social pedimos algo más, porque la sociedad no es un mero agregado de personas, sino que tiene una entidad propia: unos fines propios, no necesariamente coincidentes con los de sus miembros, una organización, reglas, normas, instituciones, costumbres, etc. (aunque esta afirmación no la aceptarán algunos individualistas).

Por ello, la tolerancia será un valor social no sólo porque la mayoría de los individuos sean, cada uno por separado, tolerantes, sino en la medida en que comprometa las actuaciones de las personas, no sólo individual, sino también socialmente, como colectividad, es decir, incluyendo sus instituciones, leyes, costumbres y conductas. Son las personas las que deciden actuar de acuerdo con ciertos valores, pero el acuerdo (habitualmente implícito) de todas las que forman una sociedad (o de una gran parte de ellas) de vivir de acuerdo con esos valores los convierte en valores colectivos o sociales.

De este modo, la dimensión social de los valores añade a la dimensión personal un entorno (instituciones, leyes, incentivos, costumbres, premios y castigos, motivaciones, etc.) que trata de conseguir, como mínimo, que las conductas no sean contrarias al valor y, como ideal, que las personas se adhieran al valor, aprendan a ponerlo en práctica y vivan de acuerdo con el mismo, lo que, a su vez, reafirmará el papel de aquellas instituciones y normas. Por su parte, la dimensión personal de los valores el convencimiento con que cada persona los vive, más o menos independientemente de su entorno; las razones por las que se solidariza con ellos, etc.añade, sobre todo, firmeza a la práctica promovida por la comunidad. Pero no sólo eso, porque Los valores personales no tienen por qué coincidir con los sociales.
Y, de hecho, a menudo no coinciden. Y las relaciones entre ambos tipos de valores son complejas: coherentes o discrepantes, más o menos coherentes o discrepantes, con todos los matices. Ambos tipos de valores coexisten (lo que no crea problemas cuando son coherentes, pero sí cuando son discrepantes), se interrelacionan y se influyen mutuamente. Y como los hombres y mujeres formamos parte de numerosos grupos, de numerosas comunidades, con diversos grados de permanencia y compromiso, esas relaciones de coherencia y discrepancia se multiplican, y aquellas interrelaciones e influencias pueden presentar trayectorias dinámicas muy complejas.

De lo anterior podemos deducir también que es muy probable que la gama de valores de una persona presente contradicciones, y más aún la de una sociedad
Esto puede ocurrir porque ha elegido o aceptado valores contradictorios. 0 porque los está cambiando, y algunos de los nuevos valores no se compaginan con algunos de los antiguos. Pero vivir instalado en la incoherencia no es fácil ni, a la larga, compatible con la estabilidad psíquica, emocional y moral de la persona, debido a la existencia de procesos de aprendizaje individual y social y a la consiguiente adaptación de las conductas.
Mejorar continuamente como persona debe ser más importante que prosperar económicamente ,cuidar nuestra apariencia o llegar a tener un título de doctor , y porque esto casi es una utopía es que la humanidad se enfrenta a un peor crisis que la económica : la interpersonal.

domingo, 8 de noviembre de 2009

El desaprender


En algunos momentos de la vida ocurren eventos que nos hacen reflexionar si lo que hemos aprendido es de vigente utilidad, o si por el contrario nos conviene reciclar ese aprendizaje.
El desaprender se presenta como un enemigo del aprendizaje, cuando nos negamos a realizar este acto, ya que nos impide dejar de lado conocimientos o actitudes que pueden ser erróneas, o que es necesario dejar de lado para abrir nuestra mente a conocimientos nuevos que nos pueden enriquecer. Es la oportunidad que tienen las personas de aprender temas o cosas de interés inmediato, dejando de lado aquellos contenidos que no se ajustan a la realidad del momento, no dejar del todos sus conocimientos, sino más bien por el contrario ampliar su bagaje cultural con temas de más importancia o trascendencia para la persona . (leonel vega aguirre )
Los actuales momentos marcan un hito; el paso de una era industrial a un nuevo esquema, entre cuyas características principales tendremos el fenómeno de la Sociedad de Aprendizaje. En gran escala, la Sociedad de Aprendizaje se manifestará como un nuevo esquema de competencia donde tal vez la única alternativa de supervivencia sea el compromiso de aprender continua y creativamente.Para lo anterior se necesita de la presencia del facilitador(un docente , un capacitador ,o un instructor).Este es el representante de esta sociedad de aprendizaje, donde el aprendizaje es producto de la sinergia y de la cooperación de todos, y donde el facilitador es uno más. Para ello el facilitador debe asumir un nuevo rol, poniendo en duda todos sus supuestos y tomando conciencia de los elementos que motivan y estimulan al socio de aprendizaje, para incorporarlo al proceso en forma activa, y generando diversión al mismo tiempo.

El aprendizaje es una de las facetas más asombrosas del comportamiento. Es algo que ocurre permanentemente, y el conocimiento que vamos adquiriendo durante nuestras vidas, es en esencia lo que nos permite adaptarnos y progresar en este mundo.
En la medida en que las cosas cambian, algunos conocimientos y destrezas se van volviendo obsoletos o no se adecuan a los nuevos requerimientos. La mano de obra de la fábrica está siendo sustituida hoy por la robótica; el conocimiento y las capacidades necesarias para poner en marcha una fábrica actual son muy distintas a las que se necesitaban treinta años atrás. La información está trayendo consigo nuevos esquemas de organización que eran imposibles de conseguir hace diez años, y estos nuevos esquemas están acompañados de nuevas necesidades de conocimientos.
Se hace cada vez más necesario que la persona adquiera nuevos conocimientos y desarrolle nuevas capacidades y destrezas, en lugar de simplemente actualizarse. Si bien esto parece bastante lógico, no resulta tan fácil cambiar los hábitos, las actitudes, las destrezas y los conocimientos de la persona; en algunos casos el aprendizaje de cosas nuevas puede tornarse cuesta arriba.
Puede ocurrir que el nuevo conocimiento implique hacer las cosas de forma totalmente contraria u opuesta a la manera en que habitualmente se venía realizando. En estos casos hay que desaprender primero, antes de pasar a aprender.
Desaprender en este contexto significa: Proceso por medio del cual se trata de olvidar o descartar conocimiento acumulado aprendido con anterioridad. Todos tenemos algo que desaprender; entre esas cosas podemos mencionar hábitos, dependencias y prejuicios.
Desaprender puede verse como una actitud que busca deshacerse de aquellas cosas que impiden el desarrollo y evolución personal por medio del aprendizaje. Desaprender es casi como tener una segunda oportunidad, ya que al desaprender nos estamos abriendo a la posibilidad de vivir experiencias y entrar en contacto con cosas que de otra manera no nos permitiríamos.
Desaprender no puede tener lugar a menos que las personas acepten que hay actitudes, conocimientos y destrezas que deben modificar. Es además un acto voluntario; la persona puede iniciarlo y finalizarlo cuando lo desee, pero es importante tener en cuenta que no terminar un proceso de “desaprendizaje(Cottin Adrian).
A la par del desaprendizaje está el aprendizaje transformativo Mezirow (2000) explica el planteamiento de la propuesta como sigue:El aprendizaje transformativo se refiere al proceso mediante el cual transformamos nuestros marcos de referencia, dados por seguros (perspectivas de significado, hábitos mentales, marcos mentales), para que sean más inclusivos, exigentes, abiertos,emocionalmente capaces de cambiar y reflexivos y para que generen creencias y opiniones que demuestren ser más verdaderas o justificadas para guiar la acción.
Este proceso se da mediante una de las cuatro formas:
1. Explicación detallada de los marcos de referencia existentes. Estos constituyen
estructuras de supuestos a través de las cuales se entiende la propia experiencia.
Como tal, comprenden componentes cognitivos y emocionales.
2. Aprendizaje de nuevos marcos de referencia, compuestos por hábitos de la mente y
puntos de vista.
3. Transformación de los puntos de vista, sujetos a cambios continuos, ya que reflejan
adecuadamente el contenido o proceso necesario para resolver problemas. Son más
accesibles a nosotros y a la retroalimentación de los otros.
4. Transformación de los hábitos mentales, que son amplios y abstractos; y constituyen
la manera habitual de pensar, sentir y actuar de las personas .
Al cumplir con estas cuatro etapas podremos tener simultáneamente el desaprendizaje con el aprendizaje transformativo aunque hay que reconocer que uno de los más grandes obstáculos para el desaprendizaje tiene relación con la edad, entre más años tenemos más anquilosados están los esquemas aprendidos sobre todo porque creemos que todo lo sabemos y que nadie nos puede enseñar nada, es un asunto de actitud más que de imposibilidad neurológica , ya que como dice el adagio” nunca es tarde para aprender” si es que hay voluntad para hacerlo.

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